Hace un siglo publiqué un primer post donde explicaba cómo utilizar el Single Citation Matcher de Pubmed para localizar los datos de un artículo cuando no contábamos con la referencia completa. Esa opción sólo nos va a servir si el artículo que buscamos se encuentra en una revista indizada en Medline/Pubmed, así que en el caso de que hayamos probado suerte con ese método y no hayamos localizado nada, podemos proseguir la búsqueda directamente en Internet.
Supongo que conocéis, y sino hoy es un buen momento para hacerlo, Google Scholar. La principal diferencia es que mientras en Google (el de siempre) voy a obtener resultados de cualquier sitio de Internet (páginas personales, wikipedia, páginas de noticias, etc.) en Google Scholar (el «académico») sólo voy a recuperar bibliografía especializada:
Desde un solo sitio podrás realizar búsquedas en un gran número disciplinas y fuentes como, por ejemplo, estudios revisados por especialistas, tesis, libros, resúmenes y artículos de fuentes como editoriales académicas, sociedades profesionales, depósitos de impresiones preliminares, universidades y otras organizaciones académicas.
[…]
¿Cómo se clasifican los artículos?
Google Académico ordena los resultados de tu búsqueda por orden de relevancia Así, al igual que sucede con las búsquedas web en Google, las referencias más útiles aparecerán al inicio de la página. La tecnología de ranking de Google toma en consideración el texto completo de cada artículo, así como el autor, dónde fue publicado y con qué asiduidad ha sido citado en otras fuentes especializadas.
Como bibliotecaria, Google Académico me es de gran utilidad cuando me piden un artículo del que sólo sé el título, por ejemplo. Suelo comenzar mis búsquedas en PubMed, pero no todas las revistas están indizadas en PubMed. Además puede darse el caso de que me hayan pedido un artículo y la referencia que me pasan está incompleta o mal escrita. En estos casos Google Scholar me resulta muy útil porque a partir del título, por ejemplo, puedo recuperar la referencia completa. A veces es sólo la referencia que aparece en el apartado de referencias bibliográficas de otro artículo y otras muchas es la referencia del artículo y el enlace directo al mismo.
Hay mucha más literatura «libre» de la que pensamos. Es cuestión de mirar un poco más allá y no conformarnos con lo que (no) encontremos en el primer intento. Si no está en PubMed seguramente lo encontremos a través de Google Scholar. Pero también podemos intentarlo yendo directamente a la revista donde nos pedirán un registro gratuito (pero no una suscripción). Ah, y no olvidéis que en el caso de dos revistas con el título muy parecido la forma más lógica de saber que estamos ante la que nos interesa es a partir del ISSN (International Standard Serial Number).
NOTA PARA BIBLIOTECARIOS:
Si tenéis contratado un resolvedor de enlaces para vuestra biblioteca, con Google Académico podéis configurarlo para que, cuando utilicen esta herramienta, los resultados que pertenezcan a vuestros fondos aparezcan indicados con un enlace para que los usuarios puedan acceder directamente a las publicaciones. Más información aquí.
http://scholar.google.es/
http://scholar.google.es/
http://scholar.google.es/