Firmar bien para existir


La firma de los trabajos científicos puede traer dudas a los autores: ¿quiénes deberían aparecer como autores y en qué orden? ¿tiene cada autor una firma normalizada para aparecer siempre de la misma forma y ser recuperado en las bases de datos? ¿tenemos clara la firma normalizada de nuestra institución?

Para contestar la primera pregunta, ¿quién debería aparecer como autor, coautor y en qué orden?, os voy a remitir al blog de Lluís Codina(1), ya que lo explica muy bien y no tiene sentido que yo diserte aquí sobre lo mismo.

Para ayudar a responder la segunda pregunta, relacionada con la firma normalizada, tanto para autores como instituciones, os dejo aquí la propuesta de manual de ayuda a los investigadores españoles para la normalización del nombre de autores e instituciones en las publicaciones científicas(2). Este documento, que ya tiene unos años, fue elaborado para la FECYT por los grupos de investigación EC3 de la Universidad de Granada y Análisis Cuantitativos de Ciencia y Tecnología del CINDOC-CSIC.

Sin embargo, hay veces que las bases de datos cometen errores al incluir a los autores o según las diferentes prácticas editoriales de las revistas los apellidos pueden variar en su presentación. Esto es un problema cuando queremos seguir la trayectoria profesional e investigadora de un autor, calcular su productividad, visibilidad e impacto. Para resolver estos problemas de variabilidad de las firmas han surgido iniciativas en estos últimos años, como ORCID o ResearcherID. Pero tampoco me voy a meter a contar este tema porque ya hay alguien que lo ha hecho muy bien: mis colegas María Sobrido Prieto, Uxía Gutiérrez Couto y Carlos González Guitián publicaron en Index de Enfermería el artículo De la normalización de la firma científica a la identificación digital del autor(3)

Os dejo también un webinar que organizamos Paula Traver y yo en 2013 en SocialBiblio con Pablo de Castro como invitado para que nos contara en qué consiste ORCID. En el siguiente enlace tenéis la grabación del webinar y la presentación que utilizó durante la misma: ORCID: ¿una solución definitiva para la identificación de los autores?(4)

Ahora que ya tenéis información sobre quién puede firmar y en qué orden y la importancia de la firma, dejadme que os cuente una historia que suelo contar a mis alumnos. La historia de cómo uno de los estudios más relevantes del siglo XIX se atribuyó durante unos 50 años a un investigador fantasma y al que, sin embargo, todo el mundo citaba: el doctor O. Uplavici.

Jaroslav Hlava (1855-1924)

Todo comienza cuando me estoy documentando para preparar un curso. Llego a un artículo publicado en 1990 por Eugene Garfield(5) en el que habla de los errores que se encuentran en las citas y bibliografías. Aquí es donde me topo con la historia de la que os quiero hablar:

En 1938, el dr. Clifford Dobell contaba la historia del Dr. Uplavici(6), nacido en 1887 y que publicó su único paper en ese mismo año. Sí, no es una errata. Seguimos. El Dr. O. Uplavici, además, moría en el mismo momento en el que el Dr. Dobell escribía su historia, en 1938:

Imagen extraída de: Dr O. Uplavici (1887–1938) (6)

Dr. Dobell había escrito una monografía titulada The Amoebae Living in Man (1919). Quiso incluir en su bibliografía al Dr. Uplavici, ya que aparecía como autor del estudio en el que descubrió amebas en las heces y en las úlceras intestinales de pacientes con disentería. Realmente este descubrimiento no era nuevo, pero el autor informaba de que había contagiado exitosamente la disentería a varios gatos a partir de la inoculación intrarectal de heces disentéricas (que presumiblemente contenían las amebas) de humanos contagiados. Obtuvo 4 resultados positivos de 6 intentos. Por lo tanto, parece que estos fueron los primeros experimentos en los que la Entamoeba histolytica se transmitió del hombre a un gato: y cómo gatos, o gatitos, desde entonces se han utilizado ampliamente para el estudio experimental de la disentería amebiana.

Este estudio apareció publicado en checo en el Journal of Czech Physicians (7) Pero quien firmaba este artículo era el doctor Jaroslav Hlava (1855-1924), profesor de Anatomía Patológica en Praga.

Comenta el Dr. Dobell que fue incapaz de localizar ningún ejemplar del Journal of Czech Physicians (Prague) ni en Londres ni en ningún otro sitio. Consultó incluso el catálogo World List of Scientific Periodicals, pero no indicaba que existiera ningún ejemplar en ninguna biblioteca de Gran Bretaña. Os recuerdo que estamos a principios del s.XX. No se dio por vencido y tras muchas pesquisas, el Dr. Dobell consigue una copia mecanografiada gracias al Dr. J Drbohlav; su amigo checo, el Dr. F. Simer, fue quien se lo tradujo enteramente al inglés.

El paper de Hlava de 1887 estaba publicado en checo y se titulaba O úplavici. Předběžná sdělení (Sobre disentería. Comunicación preliminar)(7). Parece ser que nunca se había hecho una traducción oficial del paper a otro idioma y que los resultados del estudio se habían dado a conocer a la comunidad científica internacional a partir de un breve informe firmado por el Dr. S. Kartulis de Alexandria. Este resumen fue publicado en la revista alemana Centralblatt für Bakteriologie und Parasitenkunde. Sin embargo, por algún misterioso error, el nombre del autor fue enteramente omitido. En su lugar se tomó la primera parte del título del paper como si fuera el nombre del autor: O Úplavici (=Sobre disentería). Así fue como, en 1887, nacía el Dr. O. Uplavici de Praga y publicaba su primer ensayo sobre disentería amebiana.

Imagen extraída de: Ces auteurs qui n’ont jamais existé : Student, N. Bourbaki et la figure emblématique de la référence erronée, O. Uplavici (8)

A pesar de que el Dr. Kartulis comenta sobre su intercambio de correspondencia con el autor del paper, se refiere siempre a él como Uplavici y nunca por su verdadero nombre: Hlava. Es curioso también que alguien capaz de leer el artículo original en checo para publicar un resumen en inglés, pueda confundir el título del trabajo. Además, si se analizan los índices de la revista Centralblatt se observa que en el número 18, en el que se resumió el trabajo de Hlava, se le nombra como Uplavici, O., pero en el índice de temas del volumen aparece como Hlava, Uplavici y al final, en el índice de autores, la única entrada es Hlava (desaparece «Uplavici» sin explicaciones).

Esta situación provocó gran confusión en la literatura sobre la amebiasis y la atribución de la «Comunicación preliminar» de Hlava a varios autores: a veces la referencia es correcta a Hlava (aunque sin indicar inicial del nombre u otros calificadores), otras veces se hace referencia a «O. Hlava» (en vez de a J. Hlava), a «Hlava, Uplavici» (como si Uplavici fuera el nombre) o incluso usando «O. Hlava (O. Uplavici)» como si ambos fueran sinónimos. Incluso se ha llegado a mencionar a Hlava y a Updavici como si fueran dos autores diferentes que hubieran estudiado la disentería en gatos en sus comienzos.

Fue en 1910 cuando el Index-Catalogue of Medical and Veterinaty Zoology le otorga el título de Doctor a O. Uplavici. En 1905, en este mismo catálogo, había aparecido ya indexado el paper por primera vez, aunque la entrada estaba incompleta y se otorgó la autoría al Dr. O. Hlava. En 1910 se asigna la misma entrada a «Uplavici, O» seguido de la información «Dr.» consignado entre corchetes. No podemos saber por qué, los autores del catálogo, supieron que «O. Uplavici» era doctor.

Durante 50 años el Dr. O Uplavici ha aparecido citado en libros y revistas en Europa, América y Asia. Durante 50 años el autor real del estudio, Jaroslav Hlava, no obtuvo el reconocimiento por su trabajo.

Quizás en pleno siglo XXI ya no se perpetúen estos errores durante tantos años, pero es muy fácil que nuestro apellido aparezca mal escrito en alguna publicación y sea así incluido en una base de datos importante. Ahora sería más fácil pedir la modificación de estos errores, pero mientras tanto son citas nuestras que no aparecen y que no cuentan para nuestra producción científica. Y ojo, que nosotros también podemos ser los culpables de que un autor pierda autoría por citar mal su obra. Desde aquí te animo a que te tomes una tarde para mimar tu perfil profesional, darle una entidad a través de ORCID y ResearcherID, comprobar tus publicaciones y, por supuesto, normalizar tu firma. Tu yo del futuro te lo agradecerá.

Como siempre, si tienes alguna duda sobre firmas, autorías, cómo referenciar un artículo o cómo enviar un artículo para su publicación, recuerda que las bibliotecarias médicas estamos para ayudarte. Confía en tu bibliotecaria de cabecera.

BIBLIOGRAFÍA:

1. Artículos científicos: quién puede firmarlos y en qué orden. Ética y pragmatismo de la publicación académica [Internet]. Lluís Codina. 2018 [cited 2019 Mar 24]. Available from: https://www.lluiscodina.com/etica-publicacion-academica/

2. FECYT. Documento normalización de autores [Internet]. Información para investigadores | Recursos Científicos. [cited 2019 Mar 24]. Available from: https://www.recursoscientificos.fecyt.es/servicios/informacion

3. Sobrido Prieto M, Gutiérrez Couto U, González Guitián C. De la normalización de la firma científica a la identificación digital del autor. Index de Enfermería. 2016 Jun;25(1–2):56–9.

4. García-Puente M, Traver P, de Castro P. ORCID: ¿una solución definitiva para la identificación de autores? [Internet]. SocialBiblio. 2013 [cited 2019 Mar 24]. Available from: http://www.socialbiblio.com/materiales/orcid-solucion-definitiva-identificacion-autores

5. Garfield E. Journal editors awaken to the impact of citation errors. How we control them at ISI. Current Contents. 1990;41(13):367–75.

6. Dobell C. Dr O. Uplavici (1887–1938). Parasitology. 1938 Jun;30(02):239.

7. Hlava J. O úplavici. Předběžná sdělení . Časopis lékařův českých. 1887;26(5):70–4.

8. Lienhart A. Ces auteurs qui n’ont jamais existé : Student, N. Bourbaki et la figure emblématique de la référence erronée, O. Uplavici [Internet]. Club de l’Histoire de l’Anesthésie et de la Réanimation. [cited 2019 Mar 24]. Available from: https://www.char-fr.net/Ces-auteurs-qui-n-ont-jamais.html

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SciENcv: nueva aplicación web para el Curriculum Vitae


Recientemente MyNCBI ha sacado una nueva característica que permite a los autores e investigadores crear un perfil profesional que, si desean, pueden hacer público para la comunidad. En este perfil pueden incluir su información académica, puestos de trabajo, publicaciones, actividades de investigación, premios, becas de investigación y otras contribuciones profesionales. Además, el perfil SciENcv permite añadir el ID de ORCID si el usuario estuviera registrado en esta red.

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SciENcv es el producto final de la petición realizada por la Federal Demonstration Partnership (asociación americana de agencias e instituciones relacionadas con la investigación, las becas y ayudas otorgadas para estos fines) para reducir los procesos administrativos relacionados con las solicitudes de ayudas a la investigación.

¿Cómo crear un perfil en SciENcv?

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Una vez que hemos accedido a nuestra cuenta de MyNCBI buscaremos la caja perteneciente a SciENcv. Seguiremos el enlace correspondiente según nuestro caso. En el mío, e imagino que para la mayoría de vosotros, sería el de «If you do NOT have an eRa Commons account, follow this link to manually enter your information«. A partir de este punto irán apareciendo ventanas que nos permitirán ir completando nuestra información académica e investigadora. Por defecto, nuestro perfil en SciENcv es privado, pero podemos hacerlo público para que sea accesible para el resto de la comunidad.

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Recopilatorio estival


Recopilatorio Estival

 

No quiero dejar pasar más tiempo sin publicar en el blog, así que os hago un recopilatorio aquí. Si os surge alguna duda sobre estos recursos, dejadme un comentario:

  • SIR World Report 2012: ya se ha publicado la cuarta edición del Ranking Scimago. El SIR World Reports 2012 es la clasificación más completa de la producción científica de instituciones académicas y de investigación de todo el mundo. Os podéis descargar el informe en pdf. El informe muestra los valores absolutos para seis indicadores muy útiles, diseñados para ayudar a los usuarios finales a conocer y evaluar el impacto científico, la especialización temática, el tamaño de la producción y las redes internacionales de colaboración de las instituciones. (vía Isidro F. Aguillo)
  • Bibliothèque numèrique Medic@: la colección Medic@ (ISSN : 1164-8678), realizada por el Servicio de Historia de la Medicina de la Biblioteca interuniversitaria de Medicina de Paris, reedita en formato electrónico accesible gratuitamente documentos antiguos que pertenecen a los fondos de la biblioteca: monografías, tesis, artículos, periódicos, manuscritos… (vía Marisa Alonso – Biblioteca del Hospital Virgen de la Salud-Toledo)
  • ORCID (Open Researcher & Contributor ID): ORCID pretende ayudar en el proceso de desambigüación de los nombres en la comunicación académica mediante la creación de un registro único para los autores. ORCID ha dado a conocer las características de los identificadores universales de autor, que empezarán a asignarse en octubre de este año 2012.

Formato:
Es un número 16-dígitos que es compatible con la norma ISO (ISO 27729), también conocida como International Standard Name Identifier (ISNI). Inicialmente los orcids serán asignados al azar por el Registro ORCID a partir de un bloque de números que no estén en conflicto con ISNI. Siempre deben usarse los 16 dígitos, y no se pueden acortar para eliminar ceros a la izquierda, si los hubiere.

Check sum (comprobación de suma):
El último carácter del ORCID es una suma de comprobación. De acuerdo con la norma ISO / IEC 7064:2003, MOD 2.11, este dígito de control debe ser ‘0 ‘- ‘9’, aunque también puede ser «X» (que representa el valor 10). Se puede ver el algoritmo que se utiliza y determinar la suma de comprobación de una identificación ORCID utilizando ORCID Checksum Digit tool

Asignación:
Los identificadores sólo los asignará el Registro ORCID, ya sea a través de la propia web ORCID, o de APIs relacionadas instaladas en webs colaboradoras. Son gratuitos. Se asignarán al azar a partir de un bloque de números reservados para este propósito (inicialmente serán asignados entre 0000-0001-5000-0000 y 0000-0003-5000-000X).

Cómo expresarlo:
Se expresará como un uri http: el número será precedido por http://orcid.org/. Cada 4 dígitos se insertará un guión para ayudar la legibilidad, aunque si se eliminan los guiones el número todavía será válido.

(vía Tomàs Baiget)
  • Publicación del libro «Erradicación y control de las enfermedades producidas por virus»: La Fundación Ramón Areces acaba de publicar un libro que recoge las ponencias de un Symposium celebrado en la misma institución y coordinado por el Dr. Rafael Nájera, Profesor Emérito de la Escuela Nacional de Sanidad y Presidente del Grupo de Historia de la Virología de la Sociedad Española de Virología. Está disponible la versión en formato electrónico. (vía Elena Primo)
  • Banco de imágenes de la Medicina Española: La Real Academia Nacional de Medicina acaba de hacer público el Banco de Imágenes de la Medicina Española, que aunque inicialmente contiene fondos de la propia academia, sin embargo pretende ser una web colaborativa porque dispone de un sistema para que usuarios, previamente identificados, puedan subir al banco imágenes sobre esta temática. (vía blog de Montaña Vivas)